El pasado 7 de septiembre se inauguró en la ciudad de Londres la muestra City & Guilds of London Art School: MA Show 2019, la cual expone las obras más destacadas de los alumnos de máster de la universidad, así como la de los artistas en residencia. Intrigada por los temas que pueden interesarle al artista y estudiante británico y qué metodologías o técnicas son las predominates, me dirijo a esta exposición apoyada por Windsor and Newton y situada en uno de los edificios históricos más emblemáticos de la ciudad, el 124 de Kennington Park Road.
La muestra, divida en tres plantas y dos edificaciones separadas, alberga la obra de: quince graduados (Raen Barnsley, Joe Bucklow, Ema Mano Epps, Hugo Flores, Rachel Goodison, Geraldine van Heemstra, Laura Hudson, Ru Knox, Verde Cordero Di Montezemolo, Lucienne O’Mara, Charlotte Osborne, Nick Paton, Eleanor Watson, Tracy Whitehead y Maddie Yuille); Wendy Saunders, estudiante de máster cuando fallece a inicios de año; tres artistas ganadores de las Woodwork Fellows (Alastair Gordon, Gray Wielebinski y Taku Obata); tres artistas ganadores de las Decorative Surfaces Fellows (James Boman, Ana Kazaroff y Polly Bennett); nueve estudiantes de primer año (Stephen Bell, Jyoti Bharwani, Clare Davidson, Suki Jobson, Lindsay Pickett, Ian Ryan, Alexandra Sivov, y Graham Treadwell); y la elegida Chair of Students 2018/19, Clare Dudeney.
Las obras de los MA Graduates, se ubican, de forma general, en la primera planta de ambas edificaciones. El recorrido de la exposición se inicia con las obras de Joseph Bucklow y Nick Paton.
Interesado por el paisaje industrial, Nick Paton elabora una serie de esculturas e instalaciones donde bronce y cerámica son utilizados de forma experimental dejando que sea la práctica y el material en sí los que dibujen la forma de cada pieza. De este modo y colocando posteriormente sus objetos en escenarios, Nick explora las ideas de “proceso natural”, “hecho por el ser humano”, “territorio” y frontera”.
Movido también por el paisaje y la huella humana, Joseph Bucklow, utiliza la pintura, la fotografía y el collage para hablar de la experiencia de estar en esos lugares donde la desolación, lo olvidado y lo despoblado son sus elementos más característicos. Su obra se mueve entre la fidelidad del archivo fotográfico y la vivencia personal al intervenir con el solapamiento de imágenes las multiples vistas de los lugares que le rodean.
La sala número dos contiene tres obras de Ru Knox y nueve de Charlotte Osborne.
Ru Knox trabaja con la pintura al óleo sobre telas de lienzo de gran formato para crear mundos inmersivos que cabalgan entre la imaginación y la realidad. Ru, utiliza técnicas de tradiciones muy diferentes para jugar con el control y el azar, ofreciendo así trabajos que combinan armonía y disonancia, cadencia y ritmo, enfoque y desorientación.
Charlotte Osborne también trabaja sobre la materialidad y viscosidad, en este caso ella utiliza para expresarse materiales como la cera y el toffee pasándolos de su estado líquido a su estado sólido y viceversa. Charlotte crea con estos materiales obras en papel que hablan sobre la imagen del cuerpo idealizado promovido por una cultura visual, e instalaciones formadas por frascos de cristal que aluden a la necesidad humana de encapsular, preservar y categorizar a la naturaleza.
En la tercera sala Rachel Goodison nos habla, con el uso de las acuarelas y a través de objetos encontrados y objetos cotidianos como la lana, sobre las nociones de “presencia” y “ausencia”, “fantasía” y “realidad”. Utilizando el juego y el azar como metodología de trabajo, Rachel crea atmósferas que se mueven entre lo figurativo, lo absurdo, la luz y la oscuridad.
Eleanor Watson presenta una instalación formada por varios grabados hechos a partir de tintas con base de aceite y papel japonés y pinturas al óleo sobre tablillas de madera. Eleanor trabaja partiendo de fotografías encontradas en catálogos de casas históricas para hablar de la tradición, la historia británica y las aspiraciones y deseos de la clase media.
Laura Hudson y Wendy Saunders muestran su obra en la cuarta sala de la primera edificación.
Laura Hudson, curadora y artista, se centra en la pintura y dibujo tradicionales como resistencia a las condiciones de control y rapidez características de la era contemporánea. Partiendo de la imaginación y el azar, Laura alude a situaciones socio-políticas actuales y a los conceptos de “verdades alternativas’ y “fake-news”. Por ello, sus obras están repletas de referencias a la duplicidad, el espejo y la disrupción simbolizadas por máscaras, cascos y gafas.
La obra de Wendy Saunders se centra en las posibilidades formales de la pintura, abstrayendo a la vez, imágenes de cabezas humanas. Cuestionándose la categoría de retrato, sus trabajos representan las maneras en que los materiales pueden reproducir estados mentales y representaciones antropomórficas.
El artista multidisciplinar Hugo Flores exhibe en la sala número cinco un video que habla sobre la fragilidad de la memoria a través de imágenes oscuras que prueban su relación con el material.
La sexta sala acoge las obras de Ema Epps y Lucienne O’Mara, ambas preocupadas por las nociones de cuerpo y pintura.
Ema Epps investiga el cuerpo y la piel, mientras experimenta con el comportamiento de materiales como el cristal, la tela, el papel, el metal, la tierra y el yeso al ser trabajados y manipulados. La facilidad del cambio de estado del cristal y del metal, y de pasar a la forma tridimensional a con la tela y el papel, permiten a Ema reflexionar sobre las dualidades efímero y permanente, y fragilidad y fuerza.
Lucienne O’Mara hace uso de la pintura al óleo para sumergirse en el abismo entre cosas, la frontera entre cuerpo y espacio y la percepción de los objetos. De este modo, la artista busca una revisión por parte del espectador sobre sus propias suposiciones.
La última sala del primer edificio la componen tres artistas: Raen Barnsley, Madeleine Yuille y Tracy Whitehead.
Raen Barnsley es una artista multidisciplinar que trabaja a partir de la perspectiva que su dislexia le proporciona. A través del diseño gráfico, la escultura, el grabado o la pintura, Raen hace representaciones visuales de sus procesos de escritura y lectura. Del mismo modo, la artista tiene un profundo interés por traer lo virtual a lo no-virtual.
Madeleine Yuille presenta una serie de pinturas en acrílico donde la luz y el espacio son los protagonistas. Maddie, pinta la luz que atraviesa los diferentes materiales e incide sobre los espacios otorgándoles una atmósfera bañada en melancolía, anhelo por lo desconocido y quietud. Partiendo de sus propias fotografías, busca crear un lugar entre lo real y lo ficticio que vuelva extraño a lo mundano.
La obra de Tracy Whitehead se presenta en una instalación multidisciplinar que incluye, entre otros, esculturas, pinturas y fotografías. Tracy se interesa por el espacio físico que existe entre lo analógico y lo digital, dos espacios que conviven y se empujan entre ellos. Error y copia son ejes fundamentales en su investigación, los cuales lleva a la práctica a través del uso del collage y la tecnología de baja resolución.
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