A tan solo un par de semanas del cierre de la aclamada exposición Is this Tomorrow? me dirijo a la Withechapel Gallery de Londres con el particular interés de ver cómo dos disciplinas tan comúnmente departamentalizadas (arte y arquitectura) son conjugadas positivamente en un mismo lugar, creando obras que cabalgan entre ambas prácticas mientras ofrecen una reflexión sobre las sociedades contemporáneas y futuras.
Esta exposición surge como respuesta a la pasada This is Tomorrow celebrada en la misma galería el año 1956 cuyo objetivo era el de presentar al público el arte y la arquitectura del futuro, unas disciplinas con unos bordes cada vez más difusos y que encontrarían su espacio en una colaboración auténtica. This is Tomorrow (1956) fue inaugurada por el robot Robby de la película Forbbiden Planet y estaba formada por doce grupos de artistas, arquitectos, músicos y diseñadores gráficos, entre ellos Theo Crosby, William Turbnbull, Edward Wright, Germano Facetti, Richard Hamilton, John Mchale, John Voelcker, James Hull, J. D. H. Catleugh, Leslie Thornton, Anthony Jackson, Sarah Jackson, Emilio Scavino y Anthony Hill, los cuales trabajaron independientemente en la producción de sus obras concibiendo el espacio expositivo como un único ambiente multi-disciplinar, lo que marcó un nuevo concepto de instalación artística.
Sesenta años después de una Inglaterra gris post-industrial y destruida por la guerra, Londres se convierte en una de las ciudades más seducidas por la tecnología, modernización, espectáculo, rapidez y color de las sociedades del capitalismo tardío. Preocupados por las cuestiones socio-políticas actuales de medioambiente, vivienda, bioingeniería, migración, gentrificación, género y especulación económica e inmobiliaria, diez grupos de artistas y arquitectos se juntan para, a través de vídeos, diseño gráfico, instalaciones, objetos, estructuras y sistemas, crear una serie de proyectos que invitan a ser experimentados.
La primera obra, Enclosure, está realizada por 6a Architects (Tom Emerson, Stephanie Macdonals y Owen Watson) y la artista Amalia Pica. La pieza es una instalación que puede ser recorrida y que simula diferentes partes de viviendas de animales que, junto con panfletos de supermercados, frases hechas, objetos y sistemas de construcción y retención de animales usados en granjas, se centra en la historia y política de los mismos.
Sankofa Pavilion es la segunda de las piezas artísticas que se encuentra en la primera planta. Kapwani Kiwanga y Adjaye Architects (Sir David Arjaye y Ducan Wilson) hacen uso de la palabra “sankofa”, que en ashanti significa ‘usar el pasado como guía del futuro’, para crear una instalación con forma de estrella constituida por grandes paneles de cristales tintados que, jugando con las propiedades de privacidad y apertura que el cristal ofrece, sirva como punto de meditación y encuentro con el pasado y debatir así tanto sobre él como sobre el futuro.
Apparata de Hardeep Pandhal y Thugz Mansion (Oliver Choyce, Nicholas Lobo Brennan y Astrid Smitham), es una instalación formada por columnas y paredes de geso y cemento, espejos, poemas, música, estructuras de metal y graffitis que, provocando una tensión entre estabilidad e inestabilidad, nos muestra un lugar a medias entre las ruinas y la construcción, aludiendo a su vez a la jerarquía institucional y a las políticas fallidas.
I Want to be the Future: The Anatomy of Technological Seduction de Cao Fei y mono office (Pablo Alfonso Resa Abad, Miguel Esteban Alonso, Hit Huen y Zhao Liqun) nos muestra una relación seductiva y a la vez desasosegante entre la tecnología, la sociedad y el individuo. Inspirados en la concepción que la mayoría de personas tienen sobre China como la meca de la tecnología barata y símbolo de futuro, pero que realmente difiere del verismo de la China moderna, el grupo de artistas y arquitectos crean un tótem arquitectónico como una máquina compuesta por diferentes herramientas que reflejan nuestros usos, obsesiones y adaptaciones a la tecnología y que apunta también a cómo esta cambiará en el futuro como resultado de nuestra interacción con ella.
Spirits Roaming the Earth es la última obra de la primera sala. Jacolby Stterwhite y Office for Political Innovation (Andrés Jaque, Juan David Barreto, Roberto González García, Alberto Heras, Garazi Lara, Luis González Martínez-Cabrera, Bansi Mehta, Jesús Meseguer y Paola Pardo-Castillo) crean una instalación que se despliega en forma de montaña revelándonos, a través de diferentes videos estructuras escondidas y modos reales y ficticios de vida contemporánea como la modificación genética, riqueza, actividades sexuales, gentrificación y visivilización queer, lo que sucede todo en una misma torre de viviendas y oficinas.
Mind Garden, Heart Garden creada por Mariana Castillo Deball y Tatiana Bilbao Estudio (Alba Cortes, Sophia de Saint Phalle y Paulina Sevilla), nos presentan un sistema de medición de tiempo y distancia basado en el calendario mesoamericano Tonalpohualli y la exploración arquitectónica en torno a la necesidad humana de estar aislado y comunalmente conectado. La estructura de metal se despliega por diferentes espacios de la galería marcando coordenadas espaciales y temporales que aluden a las vidas individuales y a los encuentros inter-personales.
La segunda obra de la segunda sala, con Phoenix Will Rise, Rana Begum y Marina Tabassum Architects (Tasneem Farah Siddique, Marina Tabassum y Argha Shaha), aludiendo al mitológico ave Fénix, crean un ambiente espiritual donde la luz es la protagonista a través de la creación de una bóveda abierta en la galería.
David Kohn architects (Mungo Adam-Smith, Elva Choi, David Kohn, Jessica Lyons, María Bartau Madariaga y Bushra Mohamed) y Simon Fujiwara con The Salvator Mundi Experience, presentan su proyecto de investigación sobre fenómenos de masa culturales, como la obra de Leonardo da Vinci Salvator Mundi, el parque temático Ferrari World, o el edificio más largo del mundo Burj al Khalifa, para hablar de un mundo post-artístico, post-arquitectónico e incluso post-cultural.
Con Borders/Inclusivity, Zineb Sedira y Farshid Moussavi Architecture (Farshid Moussavi y Zsuzsa Peter) nos presentan una instalación circular que puede ser recorrida y que habla sobre las fronteras existentes y en construcción entre países y los bordes entre las zonas públicas y privadas que cierran el libre movimiento de personas, información y bienes con el fin de crear una sociedad homogénea. La instalación está formada por ocho cilindros que actúan como barreras y que pueden ser bidireccionales o de una sola dirección, concebidas para que, activando el sentido de movimiento, se activen también en el individuo, a través de los sonidos naturales de alarmas y aparatos electrónicos, recuerdos de paso de controles de acceso y seguridad.
Finalmente, Rachel Amstrong y Cécile B. Evans, crean 999 years, 13 sqm (the future belongs to ghosts), una caja transparente de 13 metros cuadrados, que es el tamaño de la vivienda oficial más pequeña en Londres, a la vez que hacen referencia al contrato de alquiler más largo en el Reino Unido, 999 años. La instalación, con una colonia de microbios y un texto formado por diferentes conversaciones entorno al proyecto, se nos presenta como una predicción de un futuro muerto construido a partir de los fallos del pasado.