Artículo de Jorge Luis Marzo, publicado en Quadern de les idees, les arts i les lletres. nº 201. Fundació Ars, Sabadell, 2015
El establecimiento de las industrias creativas como sucesoras del espacio artístico es perfectamente definible en términos de moralismo. Las industrias creativas, a diferencia del arte, tal y como este fue andamiado por la modernidad, no son moralistas. Esta condición es esencial para comprender la palpable percepción de que entre los antiguos públicos existe una amplia sensación de que se han liberado de una pesada sombra que requería de ellos adhesiones ideológicas. Este es un proceso que puede interpretarse tanto en términos de «liberación» como de «liberalización» de los públicos.
Imagen: Archivo Jorge Luis Marzo. Extraída de Quadern de les idees, les arts i les lletres. nº 201. Fundació Ars, Sabadell, 2015